¿Por qué debemos centrarnos en el evangelio?

Los evangélicos del siglo XXI tienen una propensión a usar palabras o frases que están a la moda. Tal vez muchas de estas frases se inventan con buenas intenciones, pero al repetirlas con frecuencia, tienden a perder su significado. Entiendo la ironía en escribir sobre el peligro de usar frases a la moda —por ejemplo, la centralidad del evangelio— en una página como Coalición, donde se ha escrito varios artículos sobre esto.

Sin embargo, es justamente por esa razón que pienso que es muy importante regresar a estas frases populares para definirlas, estudiarlas, y decidir si realmente son frases que sirven a la Iglesia o a lo peor solo la distraen. 

Es mi anhelo cada día ser una persona centrada en el evangelio, pero me he tardado en adoptar esta nueva terminología por falta de entendimiento de ella. En nuestros círculos evangélicos es fácil asumir que todos están pensando en la misma línea, y sin duda he encontrado muchos artículos en Coalición explicando qué significa estar centrado en el evangelio. Sin embargo, creo que nos ha pasado por alto el explicar por qué debemos centrarnos en el evangelio. 

Entonces, aquí les comparto tres razones por las que he decido centrarme en el evangelio.