Recuerda el evangelio cuando debates

“Amados, por el gran empeño que tenía en escribirles acerca de nuestra común salvación, he sentido la necesidad de escribirles exhortándolos a luchar ardientemente por la fe que de una vez para siempre fue entregada a los santos”, Judas 1:3

Este pasaje de Judas es uno que fundamenta la apologética. En apariencia, nos invita a ser agresivo. Pareciera ser una contradicción con “la mansedubre” de la que nos habla 1 Pedro 3:15. Pero como creyentes apasionados por la pureza y suficiencia bíblica sabemos que las contradicciones en la Biblia son imposibles. No suceden. 

En realidad, Judas no nos está exhortando a una aparente agresividad. A la luz de cómo presentar una razón de la esperanza que hay en cada cristiano, y debido al embate interno que en la actualidad está sufriendo el evangelio, el pasaje de Judas no se refiere a contender como una mera forma de pelear y discutir de manera enceguecedora, a tontas y locas. Mucho menos se refiere a ofuscarse al momento de presentar la razón por la fe dada una vez y para siempre.